No hay fecha oficial de lanzamiento pero Ikea ya está calentando el ambiente presentándola en Milán como la cámara de fotos más barata del mercado (sin dar una cifra). Apuesto a que va a ser un superventas.
Lo más inmediato que observamos es que es de cartón, que va a pilas, tiene conector USB y un nombre muy "ikea": Knappa. Nos dicen que su sensor es de 2,3 megapíxeles y que (¡cómo no tratándose de Ikea!) la venden desmontada.
Una vez montada, la enciendes y esperas a que el chivato en la parte posterior cambie a verde para poder empezar a hacer fotos. Después de tirar las cuarenta fotos que puede almacenar las descargas al ordenador con el USB.
No hay comentarios:
Publicar un comentario