Durante siglos, Roma ha sido invadida cada invierno por bandadas masivas de estorninos. En su serie “Murmur” (susurro), el fotógrafo Richard Barnes ha registrado las espectaculares demostraciones aéreas que estas aves realizan anualmente sobre Eur, un barrio de Roma que tenía que alojar la Exposición Universal durante la dictadura fascista de Mussolini. Las imágenes son bellas y siniestras al mismo tiempo.
"Una bandada de estorninos es conocida eufónicamente como un 'susurro', pero no hay nada poético sobre sus apetitos. Su capacidad de enfocar los dos ojos en un solo objeto (visión binocular) les permite picotear las semillas inmóviles del suelo, así como insectos en pleno vuelo. Al igual que nosotros, las aves son sumamente adaptables, pero lo que admiramos en nosotros mismos, a menudo lo aborrecemos en nuestros vecinos.Mozart tenía un estornino como mascota que podía cantar algunas estrofas de su concierto para piano en sol mayor ".
Richard Barnes
Hay un ejemplo de ésto en la película El árbol de la vida de Terrence Malick.
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